Este domingo 4 de febrero están convocadas en El Salvador elecciones presidenciales y a la Asamblea Legislativa, mientras que el 3 de marzo tendrán lugar elecciones locales; ello en medio de un régimen de excepción impuesto en todo el país desde marzo de 2022, el cual ha propiciado múltiples abusos, arbitrariedades y vulneraciones a derechos humanos, tal y como han venido denunciando diversas organizaciones de derechos humanos.
Nos preocupa que durante las semanas previas a las elecciones se ha constatado un notable incremento de la presencia de cuerpos uniformados en las calles y territorios, hecho que podría tener un efecto intimidatorio sobre la población. Además, tal y como se ha documentado reiteradamente, la militarización del territorio está relacionada con el aumento de los abusos y vulneraciones a los derechos humanos, y de manera muy especial contra las mujeres y el riesgo de éstas a vivir agresiones de carácter sexual.
Unido a ello, en este contexto también se han registrado agresiones contra periodistas, como la vivida por la fotoperiodista Jéssica Orellana mientras documentaba una entrega de paquetes de alimentos del Programa Presidencial de Apoyo Alimenticio (PPAA), una acción que se considera “campaña electoral” con fondos públicos.
Asimismo, una de las constantes del actual ciclo de gobierno ha sido el incremento de la violencia digital contra periodistas y defensoras de derechos humanos, muchas veces perpetrada desde entornos cercanos y/o afines al gobierno y con mensajes misóginos y de odio. Nos preocupa que este tipo de violencia se pueda intensificar durante estos días.
Por todo ello, desde la IM-Defensoras y la Red Salvadoreña de Defensoras hacemos un llamado al Estado salvadoreño para que garantice que este proceso electoral se desarrolle sin violencias ni intimidaciones de ningún tipo y con pleno respeto a los derechos a la participación política, a informar y a defender derechos de la población en general, así como de periodistas, personas que actúen como observadoras electorales y defensoras de derechos humanos.
También llamamos a la comunidad internacional, organizaciones y mecanismos de derechos humanos, para que se mantengan al pendiente de la situación.
Junto con la Red Salvadoreña de Defensoras nos mantendremos vigilantes, documentando y denunciando cualquier agresión contra compañeras periodistas, defensoras de derechos humanos y personas sexo-género disidentes que estarán ejerciendo su derecho al sufragio, el derecho a informar y a defender la institucionalidad democrática en El Salvador.